Tras los cambios en los términos de uso del servicio de Facebook, muchos usuarios se volcaron a algunas de las alternativas

Buenos Aires-Nomyc)-Mas allá de la postergación por parte de  WhatsApp de los cambios en su política de Condiciones y Privacidad, que permitirán que compartan datos con Facebook y los usuarios deberán dar “aceptar” para poder usar el servicio de mensajería, esto generó que muchos usuarios se vuelquen a otros servicios y los claros ganadores fueron Telegram (https://web.telegram.org/#/login) y Signal (https://signal.org/es/)

Frente a la avalancha de críticas, Facebook explicó los alcances de sus nuevas condiciones de uso y aclararon que no acceden a las comunicaciones, que siguen siendo privadas cuando señaló que “queremos abordar algunos rumores y ser 100% claros: continuamos protegiendo sus mensajes privados con cifrado de extremo a extremo”, por lo que prometen que nadie más que el emisor y el receptor puede ver el contenido de los chats.

Lo cierto es que, a pesar de las aclaraciones, mucha gente prefiere evitar el virtual monopolio de Mark Zuckerberg, que incluye a Facebook, Instagram y WhatsApp. Por eso el boom de los sistemas alternativos como Signal y Telegram, pero ¿cuáles son las diferencias entre las plataformas?

Uso de datos: los tres servicios recopilan datos, pero hay diferencias ya que WhatsApp, para comenzar, los puede compartir con Facebook y otras compañías, también guarda muchos “metadatos”, no el texto de los mensajes pero sí la marca del teléfono que usamos, la hora del mensaje y la ubicación, entre otras cosas, lo que le sirve para saber más de los usuarios y además la compañía usa un código de programación cerrado, por lo que no se puede saber mucho sobre la información que recopila.

Telegram y Signal, en cambio, recopilan muchos menos datos y mientras la primera pide el número de teléfono, nombre y lista de contactos, Signal solo solicita el teléfono, agregar el nombre es opcional, aunque  eso no es todo: ambas plataformas usan códigos de programación abiertos, por los que los expertos pueden “meterse” para investigar cuáles son los datos que obtienen de los usuarios y qué hacen con ellos.

Encriptación y mensajes: en la actualidad Signal y WhatsApp ofrecen el cifrado de extremo a extremo de forma predeterminada en las conversaciones de los usuarios, lo que quiere decir que solo emisor y receptor pueden acceder a los contenidos, o dicho de otra forma, WhatsApp o Facebook, ni tampoco Signal en su plataforma, pueden leer lo que escribimos o escuchar las llamadas o audios y este es uno de los puntos que destacó la empresa de Mark Zuckerberg en estos días.

Telegram tiene alguna diferencia ya que todos los mensajes en esa plataforma son cifrados de forma segura, pero solo los mensajes de los chats secretos utilizan un cifrado cliente-cliente, mientras los chats en la nube utilizan un cifrado cliente-servidor/servidor-cliente, y son almacenados cifrados en la nube de Telegram.

Los tres servicios ofrecen, además, la opción de mensajes “temporales”, que se autodestruyen, lo que incluye texto, fotos, videos y documentos, aunque  la diferencia es que en WhatsApp desaparecen a los siete días, mientras que en sus competidores se puede configurar para que la interacción se autodestruya en algunos segundos.

Usos: aunque la mayoría de los usuarios quieren estas aplicaciones para comunicarse con amigos, familiares y conocidos, con el tiempo se fueron encontrando otros usos y Telegram, además de ser una fuente inagotable de piratería ya que se pueden encontrar libros, películas, series y pornografía-, también se utilizó como medio de difusión de propaganda del Estado Islámico.

Los extremistas aprovechaban los chats grupales encriptados para enviar comunicados y difundir videos y algo que también replicaron en el último tiempo grupos de derecha estadounidense para divulgar sus mensajes, aunque se cree que también usan otras apps que permiten iteracciones anónimas para convocar a acciones o divulgar teorías conspirativas.

WhatsApp tuvo algunos problemas con grupos ya que además de la difusión de noticias falsas, especialmente en contextos electorales, en 2019 decidió eliminar cientos de miles de cuentas sospechadas de usar el servicio para distribuir pornografía infantil.

Signal, por ahora, no fue acusada de este tipo de accionar, aunque hubo polémica en Españaya que denunciaron que el expresidente del gobierno regional de Cataluña, Carles Puigdemont, habría usado esta aplicación para hablar con algunos de sus aliados cuando intentó declarar la independencia de la región.

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