Aunque todavía no se usan para transplantes es un gran paso en este camino

Buenos Aires-(Nomyc)-El desarrollo de un protoriñon en el embrión de un cerdo se dió en los que se llama “Prueva de Concepto”, es decir que se sabe que se puede hacer, aunque no significa que se “juegue a ser Dios” sino que se pretende solucionar un problema de cantidades ya que, por ejemplo, en Estados Unidos, se transplantan unos 150.000 por año y la lista de espera es de 100 mil de las que 14 fallecen cada 24 horas, mientras que en Argntina, al dia de hoy, se hicieron 991 transplantes de este órgano, lo que representa el 91 por ciento del total de las intervenciones.

Este éxito, realizado por científicos chinos y el médico español Miguel Ángel Esteban, supone generar por primera vez “un esbozo de órgano humano en otro animal” y los investigadores toman el embrión de cerdo, modificado desde lo genético para que no desarrolle su propio riñón, y le introducen células humanas para que cubran ese vacío en su desarrollo.

‌Así, el riñón resultante, o el corazón o el hígado…, es humano, ya que las células introducidas serían de mi cuerpo, para que ese órgano sea mío, no solo para mí” resume el investigador Juan Carlos Izpisua, pionero en estos experimentos explica “da un paso más allá y demuestra que las células se pueden organizar en el espacio y dar lugar a estructuras tisulares organizadas, aunque todavía no se logró desarrollar órganos humanizados maduros en cerdos, pero este estudio no carca un maso más y es un gran paso”.   

La parte optimista de esta historia la aporta el nefrólogo Josep Maria Campistol, director general del Hospital Clínic de Barcelona, quien señala “podrían ser una fuente de órganos, con posibilidad además, de generar órganos humanos específicos  personalizados para determinados pacientes”.

“Estoy convencido de que, en un futuro próximo, vamos a ser capaces de regenerar los riñones, el hígado o el corazón, que tengan alguna enfermedad crónica para reestablecer su función y evitar el transplante” agrega.

A partir de aquí, llegan los debates éticos y las complicaciones científicas, ya que por ejemplo, al introducir las células humanas en el embrión, algunas escaparon al cerebro y en este caso, interrumpieron la gestación a los 28 días, pero si hubiera llegado a término, el embarazo de las cerdas dura casi 4 meses, ese lechón tendría neuronas humana.

Debido a esto, surgen las críticas de Rafael Matesanz, fundador de la Organización Nacional de Trasplantes española quien señala “es un paso muy importante y significativo, desde lo conceptual, pero no es la antesala de producir riñones ni mucho menos”.

“El gran riesgo es que las células se te vayan al sistema nervioso central y generen un cerdo-hombre, o que se dirijan al sistema reproductor y pase lo mismo, porque hay una clara derivación de todos estos experimentos hacia china, que tiene una legislación mucho más laxa que la española o estadounidense”.

Llegados a esta situación, hay otra opción pareida, que ya se probó, órganos de cerdo modoficados de manera genética, que ya se ha probado, para que no los rechace el cuerpo, es decir que en lugar de órganos humanos cultivados en cerdos, se usan órganos de cerdos que se adaptan a humanos y en todo caso.        

Nomyc-9-10-23