Nueva Guía Alimentaria para la Población Argentina

Fue presentada hace pocos días. La versión anterior era del año 2000  

Buenos Aires-(Nomyc)-Esta Guía, que tienen como objetivo ser una herramienta de planificación para los sectores de salud, educación, producción, industria, comercio, y todos los que trabajen la temática de alimentación, traducen las metas nutricionales establecidas para la población en mensajes prácticos para usuarios y destinatarios, redactados en un lenguaje sencillo, coloquial y comprensible, proporcionando herramientas que puedan conjugar las costumbres locales con estilos de vida más saludables.

Son de carácter nacional y para su diseño se contempló la situación alimentario – nutricional y epidemiológica de todo el país.

Distintas fuentes de información nutricional comienzan a mostrar, en la última década, el excesivo consumo de grasas, de manera especial las saturadas, y de azúcares libres, así como la falta de fibra en la alimentación. Cada vez con mayor frecuencia la población elige alimentos con menor valor nutricional y mayor valor calórico.

Los estilos de vida son cada vez más sedentarios, favorecidos por los avances en urbanización y tecnología, con lo que hay que prestar atención al cambio del perfil epidemiológico, del cual estamos siendo partícipes, aunque los problemas de salud relacionados con carencias y déficit nutricionales continúan conviviendo con las Enfermedades Crónicas No Transmisibles (ECNT), a nivel mundial presentan una mejoría.

La incidencia de la desnutrición de la población de los países en desarrollo fue mejorando, como lo muestran los datos a nivel mundial ya que entre 1990 y 1992 unas 1015 millones de personas presentaban déficit de nutrición, un 19 por ciento; entre 2000 y 2002 descendió a 930 millones, es decir un15 por ciento.

Esta tendencia continúa entre 2006 y 2008 donde se calculó 918 millones, un14 por ciento y entre 2009 y 2011 descendió a 841 millones, es decir un 12 por ciento y las últimas mediciones de los años 2012 y 2014 marcan 805 millones, es decir un 11 por ciento.

Según los especialistas “de seguir esta tendencia se espera que para el 2030 la incidencia de desnutrición en la población sea del 6 por ciento pero a pesar de las reducciones en la proporción de personas desnutridas, el crecimiento continuado de la población puede generar que el progreso en la reducción del número total sea más lento”.

Si bien éste continúa siendo un problema latente, las ECNT pasaron a ser el centro de atención en las agendas en salud de todos los países.

Las ECNT son la causa de muerte de más de 36 millones de personas en el mundo cada año, casi el 80 por ciento de las defunciones ocurren en países de ingresos bajos y medios. Más de 9 millones de los fallecimientos por ECNT se producen en personas menores de 60 años.

Las enfermedades vasculares constituyen la mayoría de las muertes con 17,3 millones cada año, seguidas por el cáncer con 7,6 millones, enfermedades respiratorias con 4,2 millones y diabetes con 1,3 millones.

Estos cuatro grupos de enfermedades son responsables de alrededor del 80 por ciento de las defunciones por ECNT.

En el mundo, desde 1980 la obesidad, que es un factor de riesgo para este grupo de enfermedades, creció de manera exponencial, multiplicarse por más de dos y explican el 44 por ciento de la carga de diabetes, el 23 por ciento de la cardiopatía isquémica, entre el 7 y el 14 por ciento de ciertos cánceres, además de los efectos deletéreos en cuanto a cantidad y calidad de vida en grupos etarios más jóvenes de la población.

El 65 por ciento de la población mundial vive en países donde el sobrepeso y la obesidad se cobran más vidas de personas que la insuficiencia ponderal con 2,6 millones de personas que mueren por causas relacionadas a esta enfermedad.

En 2008 alrededor de 1400 millones de adultos de 20 años o más ya tenían sobrepeso, en 2013 aproximadamente 42 millones de niños menores de 5 años tenían sobrepeso, en 2014 unos 1900 millones, es decir un 39 por ciento de las personas adultas a nivel mundial tenían sobrepeso y 600 millones, es decir un 13 por ciento, obesidad  haciendo de esta enfermedad una verdadera epidemia.

En nuestro país, el primer relevamiento fue la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR) realizada en el año 2005 que arrojó que un 34,5 por ciento de la población tenía SP y un 14,6 por ciento obesidad, es decir que el 49,1 por ciento de la población argentina presentaba exceso de peso.

En 2009, según los datos de la 2° ENFR, la prevalencia aumentó al 35,5 por ciento para sobrepeso y al 18 por ciento obesidad, es decir que, más de la mitad de la población, un 53,4 por ciento tenía exceso de peso en algún grado.

La 3° ENFR, en 2013, continuó mostró la misma tendencia mientras que la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (ENNyS), arrojó datos similares, al igual que la 2° Encuesta Mundial de Salud Escolar (EMSE) realizada en el año 2012, que mostró en el grupo de escolares un aumento de casi un 5 por ciento de sobrepeso y 1,5 por ciento de obesidad, con respecto a la que se realizó en 2007.

Como dato común a todo lo antes mencionado debemos resaltar que las ECNT como la diabetes o la hipertensión comparten FR modificables: alimentación inadecuada, falta de actividad física, consumo de tabaco y consumo excesivo de alcohol, áreas sobre las cuales podemos planificar y trabajar.

Las Guías Alimentarias Basadas en Alimentos (GABA) se constituyen como un aporte fundamental en el logro de las metas establecidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la estrategia mundial sobre “Régimen alimentario, actividad física y salud” del 2004.

Según los diagnósticos realizados, buscan contribuir a que las personas limiten la ingesta energética procedente de las grasas saturadas y prefieran las insaturadas, se eliminen las grasas trans de los alimentos, aumenten el consumo de frutas y verduras, legumbres, cereales integrales y frutas secas, y limiten la ingesta de azúcares libres y de sal.

Resumen de la Guía Alimentaria para la Población Argentina  en 10 mensajes

Mensaje 1: Incorporar a diario alimentos de todos los grupos y realizar al menos 30 minutos de actividad física. 1. Realizar 4 comidas al día, es decir desayuno, almuerzo, merienda y cena; incluir verduras, frutas, legumbres, cereales, leche, yogur o queso, huevos, carnes y aceites. 2. Realizar actividad física moderada continua o fraccionada todos los días para mantener una vida activa. 3. Comer tranquilo, en lo posible acompañado y moderar el tamaño de las porciones. 4. Elegir alimentos preparados en casa en lugar de procesados. 5. Mantener una vida activa, un peso adecuado y una alimentación saludable previene enfermedades.

Mensaje 2: Tomar a diario 8 vasos de agua segura. 1. A lo largo del día beber al menos 2 litros de líquidos, sin azúcar, de manera preferente agua. 2. No esperar a tener sed para hidratarse. 3. Para lavar los alimentos y cocinar, el agua debe ser segura.

Mensaje 3: Consumir a diario 5 porciones de frutas y verduras en variedad de tipos y colores. 1. Consumir al menos medio plato de verduras en el almuerzo, medio plato en la cena y 2 o 3 frutas por día. 2. Lavar las frutas y verduras con agua segura. 3. Las frutas y verduras de estación son más accesibles y de mejor calidad. 4. El consumo de frutas y verduras diario disminuye el riesgo de padecer obesidad, diabetes, cáncer de colon y enfermedades cardiovasculares.

Mensaje 4: Reducir el uso de sal y el consumo de alimentos con alto contenido de sodio. 1. Cocinar sin sal, limitar el agregado en las comidas y evitar el salero en la mesa. 2. Para reemplazar la sal utilizar condimentos de todo tipo como pimienta, perejil, ají, pimentón, orégano, etc.. 3. Los fiambres, embutidos y otros alimentos procesados como caldos, sopas y conservas que contienen elevada cantidad de sodio, al elegirlos en la compra leer las etiquetas. 4. Disminuir el consumo de sal previene la hipertensión, enfermedades vasculares y renales, entre otras.

Mensaje 5: Limitar el consumo de bebidas azucaradas y de alimentos con elevado contenido de grasas, azúcar y sal. 1. Limitar el consumo de golosinas, amasados de pastelería y productos de copetín como palitos salados, papas fritas de paquete, etc.. 2. Limitar el consumo de bebidas azucaradas y la cantidad de azúcar agregada a infusiones. 3. Limitar el consumo de manteca, margarina, grasa animal y crema de leche. 4. Si se consumen, elegir porciones pequeñas y/o individuales. El consumo en exceso de estos alimentos predispone a la obesidad, hipertensión, diabetes y enfermedades cardiovasculares, entre otras.

Mensaje 6: Consumir diariamente leche, yogur o queso, preferentemente descremados. 1. Incluir 3 porciones al día de leche, yogur o queso. 2. Al comprar mirar la fecha de vencimiento y elegirlos al final de la compra para mantener la cadena de frío. 3. Elegir quesos blandos antes que duros y aquellos que tengan menor contenido de grasas y sal. 4. Los alimentos de este grupo son fuente de calcio y necesarios en todas las edades.

Mensaje 7: Al consumir carnes quitarle la grasa visible, aumentar el consumo de pescado e incluir huevo. 1. La porción diaria de carne se representa por el tamaño de la palma de la mano. 2. Incorporar carnes con las siguientes frecuencias: pescado 2 o más veces por semana, otras carnes blancas 2 veces por semana y carnes rojas hasta 3 veces por semana. 3. Incluir hasta un huevo por día especialmente si no se consume la cantidad necesaria de carne. 4. Cocinar las carnes hasta que no queden partes rojas o rosadas en su interior previene las enfermedades transmitidas por alimentos.

Mensaje 8: Consumir legumbres, cereales preferentemente integrales, papa, batata, choclo o mandioca. 1. Combinar legumbres y cereales es una alternativa para reemplazar la carne en algunas comidas. 2. Entre las legumbres puede elegir arvejas, lentejas, soja, porotos y garbanzos y entre los cereales arroz integral, avena, maíz, trigo burgol, cebada y centeno, entre otros. 3. Al consumir papa o batata lavarlas adecuadamente antes de la cocción y cocinarlas con cáscara.

Mensaje 9: Consumir aceite crudo como condimento, frutas secas o semillas. 1. Utilizar dos cucharadas soperas al día de aceite crudo. 2. Optar por otras formas de cocción antes que la fritura. 3. En lo posible alternar aceites (como girasol, maíz, soja, girasol alto oleico, oliva y canola). 4. Utilizar al menos una vez por semana un puñado de frutas secas sin salar como maní, nueces, almendras, avellanas, castañas, etc. o semillas de chía, girasol, sésamo, lino, etc. Sin salar. 5. El aceite crudo, las frutas secas y semillas aportan nutrientes esenciales.

Mensaje 10: El consumo de bebidas alcohólicas debe ser responsable. Los niños, adolescentes y mujeres embarazadas no deben consumirlas. Evitarlas siempre al conducir. 1. Un consumo responsable en adultos es como máximo al día, dos medidas en el hombre y una en la mujer. 2. El consumo no responsable de alcohol genera daños graves y riesgos para la salud.

Para más información se puede ingresar a http://www.msal.gob.ar/ent/index.php/archivo/noticias/482-mensajes-y-grafica-de-las-guias-alimentarias-para-la-poblacion-                                                                                                                                                                                 Nomyc-20-5-16

 

 

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