Luego de sufrir un episodio cardiovascular, con el tiempo muchas personas abandonan el control de sus factores de riesgo

En un relevamiento del Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas sobre 120 pacientes que ya habían padecido un episodio cardiovascular mostró que aunque antes del episodio más de 2 de cada 3 no se ocupaban de controlar sus factores de riesgo o lo hacían parcialmente, esa cifra cambió de manera favorable a partir del evento ya que más del 93 por ciento tomó conciencia y se controlan de manera total o parcial aunque este porcentaje baja a algo más de la mitad luego de algunos años

Buenos Aires-(Nomyc)-Aunque mucho se habla del manejo de los factores de riesgo cardiovasculares y de la necesidad de modificar conductas, entre otros, los especialistas destacan la importancia de controlar la hipertensión arterial, el colesterol elevado, el azúcar en sangre es decir la diabetes, el sedentarismo, la mala alimentación, el tabaquismo, beber alcohol en exceso, el sobrepeso, la obesidad y el estrés, aunque un relevamiento entre sus propios pacientes y allegados llevado a cabo por los especialistas del Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas (CACI) con motivo del Día Mundial del Corazón, que se conmemora hoy, evidenció una gran falta de conciencia previa a la aparición de un episodio.

Es por ello que, a partir de esa situación límite que en muchos casos implica el paso por un quirófano o una sala de hemodinamia, la gente mejora sensiblemente sus conductas, pero, con el tiempo, ese control disminuye y se corre riesgo de volver a tener un evento cardiovascular.

En efecto, sobre 120 participantes con una edad promedio de 68 años y medio años, de los que el 74,2 por ciento eran hombres y 25,4 mujeres, antes de sufrir un episodio cardiovascular más de 2 de cada 3 individuos, es decir el 70,8 por ciento no se ocupaba de mantener conductas saludables y de controlar sus factores de riesgo o lo hacía de manera parcial, según un trabajo denominado “Encuesta sobre Conciencia de Prevención Cardiovascular” hecho durante el mes de septiembre de 2022 a través de un sondeo online mediante un  formulario de Google, mostró que 

Luego del evento, la toma de conciencia es contundente: el 93,3 por ciento se encargó satisfactoriamente del control de sus factores de riesgocardiovascular, aunque tras varios años, 1 de cada 2, es decir un 52,1 por ciento reconoció que no tenía un buen control de sus parámetros y entre los motivos esgrimidos fueron variados: porque “se sentían bien”, en un 34,7 por ciento, debido a la “falta de regularidad”, en un 16,3 por ciento o simplemente porque “las tareas habituales se lo impedían”, en un 6,1 por ciento, mientras que un 26,5 por ciento y pese a manifestar que siguió haciéndose los controles, no dejó de fumar.

Por eso, no extrañó que casi 1 de cada 3 de los encuestados, es decir un 29,2 por ciento experimentara años después un segundo episodio cardiovascular; del total de los pacientes, 2 de cada 3, es decir un 66,7 por ciento debieron ser sometidos a unaangioplastia coronariaque es el procedimiento por cateterismo para desobstruir la arteria y restituir el flujo sanguíneo.

“Este relevamiento nos muestra la realidad que todos los médicos de las más variadas especialidades vemos a diario en nuestros consultorios: el gran desafío de lograr que las personas tomen conciencia y modifiquen conductas” explica Martín Cisneros, presidente del Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas (CACI).

“Los procedimientos médicos han mejorado muchísimo, tanto respecto del diagnóstico como del tratamiento; los medicamentos y las intervenciones en muchos casos han cambiado el curso de las enfermedades; pero cuando se trata de modificar hábitos y conductas, a la gente se le hace mucho más difícil y eso atenta contra el control de la enfermedad y la disminución del riesgo obtenido con los procedimientos o medicamentos”, continuó el presidente del Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas (CACI).

“En la gran mayoría de los casos, los pacientes toman conciencia de la importancia del control de los factores de riesgo cardiovascular luego de sufrir un episodio, como lo demuestra el sondeo, pero con el correr de los años esa convicción se va haciendo más flexible y algunos hasta llegan a dejar de controlarse adecuadamente por largos períodos de tiempo”, amplió AlejandroCherro, Director de la Carrera de Especialista en Hemodinamia, Angiografía General y Cardiología Intervencionista UBA-CA y ex presidente del CACI.

Los especialistas destacan que, a los factores de riesgo ‘modificables’ mencionados, hay que sumar otros “no modificables” que se potencian con los primeros, ya que por un lado, los antecedentes familiares, que, aunque no son insalvables, conllevan una mayor predisposición a desarrollar la enfermedad.

Por otro lado, la edad: a mayor edad, mayor será el riesgo porque tanto las arterias como los órganos envejecen al igual que lo hace el individuo; en el caso de las mujeres, se aumenta el riesgo desde el inicio de la menopausia y se iguala al del hombre a partir de los 65 años.

Otro factor de riesgo la administración de anticonceptivos orales en mujeres mayores de 35 años fumadoras o que presentan algún otro factor de riesgo y la sumatoria de los factores de riesgo multiplica en forma exponencial la probabilidad de desarrollar enfermedad cardiovascular.

“Tener 2 o más factores, como hipertensión y tabaquismo u obesidad, representa una situación que debe ser tratada en forma inmediata. La primera medida, sin lugar a dudas, es la visita al cardiólogo o al médico de cabecera, que son quienes lo podrán aconsejar de la mejor manera”, sostuvo Daniel Berrocal, ex presidente de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC) y miembro del CACI.

“Un dato llamativo es que 1 de cada 3 pacientes de los que relajaron sus controles lo hizo porque ‘se sentía bien’; eso es algo que también vemos habitualmente en la consulta: dejan de tomar la medicación antihipertensiva o la del colesterol solo porque se sienten bien. Es un error. Son enfermedades silenciosas que debutan con un episodio cardiovascular. La adherencia a los tratamientos es clave para el control de estas patologías”, aclaró José A.Álvarez, cardioangiólogo intervencionista miembro del CACI.

“Esperamos que este relevamiento realizado en el marco del Día Mundial del Corazón le sirva a la gente para repensar algunas conductas y reconocer que el momento de comenzar a cambiar es hoy y ahora” sostiene Cisneros.  

“Todos sabemos lo que hay que hacer y lo que no, la recomendación es proponerse metas, tanto de actividad física como de alimentación saludable, objetivos de manejo del estrés y de disminución del sobrepeso, cero tabaco, alcohol muy dosificado y presión arterial, glucemia y colesterol bajo control, entre otros; y por supuesto comenzar tomar medidas para alcanzar esas metas. Sin dilaciones. Tenemos que tomar conciencia de que la enfermedad cardiovascular, una vez instalada, presenta un camino mucho más complejo”, concluyó el especialista.

Acerca de CACI: es la única sociedad argentina en esta especialidad, se creó en 1985 con la finalidad de nuclear a todos los especialistas en diagnóstico y tratamiento de las enfermedades cardiovasculares por cateterismo y hoy cuenta con más de 600 miembros asociados.

Coordina el Programa Educativo Integral (P.E.I.), junto con los consejos de hemodinamia y cardiología intervencionista de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC) y de la Federación Argentina de Cardiología (FAC) y Participa, anualmente y en forma permanente, de los congresos internacionales más importantes de la especialidad en América Latina, Estados Unidos, Europa y Asia.

Para mayor información consultar en www.caci.org.ar / www.revistacaci.org.ar

Nomyc-29-9-22

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