Fue en la Base Esperanza en marzo de 2015 donde se registraron más de 17 grados en lo que es el mayor pico de todo el sector continental

Buenos Aires-(Nomyc)-La Organización Metereológica Mundial (OMM), aportó datos importantes para corroborar los efectos del Cambio Climático al anunciar, a principios de mes, nuevos récords de altas temperaturas en la región de la Antártida y uno de ellos se produjo en la Base Esperanza, de Argentina, el 24 de marzo de 2015, cuando el termómetro se clavó en una temperatura nunca conseguida para el sector continental: 17.5 grados, por lo que se marca la tendencia de la Antártida argentina más cálida.

Un comité de expertos de la OMM hizo el anuncio de los nuevos récords en uno de los cuales participaron dos especialistas argentinos que trabajan en el Servicio Metereológico Nacional (SMN): Milagros Skansi y José Luis Stella quienes comprobaron los datos.

“No se dan esos valores tan altos, ya una máxima de 10° es insólito” explicó Stella especialista en climatología.

“Acá verificamos un caso extremo, pero no podemos relacionarlo con el cambio climático, si bien hay una tendencia a mayor temperatura, es algo muy particular lo que sucedió, sin tener que hablar de calentamiento” agrega.

La Antártida tiene una superficie de 14 millones de kilómetros cuadrados, su manto de hielo tiene un grosor de unos 4,8 de kilómetros y contiene el 90 por ciento del agua dulce del mundo. En caso de que se fundiera ese hielo bastaría para subir el nivel del mar en unos 60 metros.

Este récord es una tendencia del aumento de la temperatura en la Antártida argentina en los últimos 50 años según Stella “hay una tendencia global y la Antártida no está exenta, el promedio de aumento es de 1 grado y mientras que en el Polo Norte se ve la disminución del hielo, aquí los números muestran una tendencia positiva y en nuestras estaciones está en ascenso”.

Además hubo otras dos marcas nunca conseguidas anteriormente. Una fueron los 19.8° en “la región de la Antártida”, definida por la OMM y las Naciones Unidas como todas las tierras que se encuentran al sur del paralelo 60°S, que se observó el 30 de enero de 1982 en la estación de investigación “Signy”.

La temperatura más alta, de -7 grados en la meseta antártica que está ubicada a una altitud igual o superior a los 2.500 metros, se registró el 28 de diciembre de 1989 en la estación metereológica automática situada en el interior de la costa Adélie.

En el SMN, con la validación de los datos conseguidos trabajó Svletana Cherkasova quienes brindó datos relevantes como la descripción geográfica, latitud, longitud de medición, el instrumental utilizado en las mediciones y el plan de labor de la Estación.

Amanda Starbuck, directora de campaña de Greenpeace comenta sobre el aumento de la temperatura de la Antártida que “este es otro de los datos que ilustra el calentamiento de la Antártida ya que el mes pasado, los niveles de hielo marino antártico alcanzaron un récord mínimo”.

“Mientras tanto, los científicos pronostican el inminente colapso de la plataforma de hielo Larsen C, que tiene una grieta que actualmente está creciendo a un tamaño equivalente al de cinco campos de fútbol cada día”.

Enrique Maurtua Konstantinidis, director del área de Cambio Climático de la Fundación Ambiente y Recursos Humanos (FARN) alerta “estos datos hay que tomarlos porque aplican a un tema más grande ya que habla del riesgo del calentamiento de la Antártida. Son señales que nos van alertando de los cambios en los patrones”.                                                                                                                                                     Nomyc-20-3-17