En el trabajo realizado por investigadores de nuestro país, Estados Unidos e Italia se señala que existiría un vínculo entre la infección asintomática causada por un parásito y esta patología

Buenos Aires-(Nomyc)-El Trichomonas vaginalis, un parásito que infecta a hombres y mujeres es la causa de la enfermedad de transmisión sexual no viral más común en el mundo, con cerca de 275 millones de afectados cada año.

El problema es que, en el caso delos hombres, más del 75 por ciento no presenta síntomas de la infección por lo que se suele llegar tarde al tratamiento.

“Al no presentar síntomas, esta infección no es tratada por lo que se produce una inflamación e irritación crónica del tejido local” explica Natalia de Miguel, investigadora asistente del Instituto de Investigaciones Biotecnologicas, que depende del CONICET, en Chascomus.

El estudio demostró que el parásito libera una proteína inflamatoria, llamada TyMIF, que es capaz de “imitar” las funciones desempeñadas por el factor que inhibe la migración de células del tejido inmunitario (HuMIF), los macrófagfos, que han sido implicados en el proceso inflamatorio.

Esta proteína, es capaz de unirse al receptor de HuMIF y aumenta el crecimiento y la invasión de células protáticas, benignas y malignas.

“Desde hace varios años –continúa de Miguel– se propone que existe cierta relación etiológoca, es decir de origen, entre la infección Propranolol 80mg ocasionada por este parásito y en cáncer de próstata, aunque sin embargo estas ideas se basaban en estudios epidemiológicos”.

“Aunque todavía es Plavix buy online demasiado pronto para añadir el cáncer de próstata a la lista de cánceres causados por enfermedades infecciosas, los resultados del trabajo realizado indicarían que a través del desarrollo de una inflamación crónica y la liberación de moléculas bioactivas, como TyMIE, la infección ocasionada por el T Vaginalis podría afectar el sistema inmune de la persona y tener cierta participación en el desarrollo del cáncer de próstata humano” explica la especialista.

Los resultados de este trabajo fueron publicados en el último número de la revista “Proceedings of the National Academy of Colchicine without prescription Sciences” (PNAS).

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