Un hospital holandés ha realizado con éxito la primera operación de sustitución de cráneo en un paciente con uno impreso en 3D buy brand Levitra online treatment of bipolar disorder Retin-A online Buy Strattera online buy Topamax generic Plavix

Buenos Aires-(Nomyc)-La operación fue realizada en el Centro Médico Universitario de Utrech, duró 23 horas y fue dirigida por Bon Verweij y es la primera vez que una extensa zona, del cráneo, casi un hemisferio completo, ha sido trasplantado.  “Gracias al uso de la impresión en 3D, podemos hacer un cráneo a la medida exacta y aunque  esto no sólo tiene grandes ventajas cosméticas, también  la función cerebral de los pacientes se recupera mejor que si se utiliza el viejo método” comenta el neurocirijano.

“El único problema fue con el cemento que utilziamos, que estaba lejos de ser el ideal” comentó Verweij.

El hospital ha esperado tres meses para anunciar el éxito de la operación, después de verificar que la paciente se recuperó por completo.

“La mujer tiene su vista hacia atrás. Ella está de vuelta al trabajo y es casi imposible ver alguna vez fue operado”, dijo Verweij.

Este es un uso notable de 3D-impresión en la medicina, pero es solo un ejemplo de cómo la capacidad de la tecnología para crear prototipos de forma rápida y barata que están ayudando a los pacientes en todo el mundo.

Los médicos están trabajando en 3D-impresión de todo lo relacionado con impalnte y elementos de uso médico, desde las prótesis, como la nariz y los ojos, a la piel humana, que no solo se replica con el tono de la piel del paciente, sino también con  las texturas de la superficie, incluyendo arrugas y venas.

Para una mirada más de cerca el cráneo trasplante exitoso realizado en Holanda se puede ver el vídeo a continuación, pero ten cuidado: no hay imágenes gráficas y un poco de materia cerebral en exhibición.

La paciente tiene 22 años, sufría de una rara enfermedad que causó que el hueso de su cráneo aumentara su espesor anormal, de 1,5 cm a 5 cm de por lo que se comenzaba a tener problemas neurológicos como mala visión, fuertes dolores de cabeza y falta de expresiones faciales debido a la presión que ejercía el cráneo contra el cerebro de la paciente.

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