Encuentran ruinas defensivas de las minas del Rey Salomón

Algunos investigadores creen que las Minas del Rey Salomón se encontraban entre los campos de Fundición de cobre del Valle de Timna en Israel
Buenos Aires-(Nomyc)-Las condiciones áridas en Timna han permitido la asombrosa preservación de materiales orgánicos de 3 mil años de antigüedad, que han proporcionado a los arqueólogos de la Universidad de Tel Aviv (TAU) una ventana única en la cultura y las prácticas de una sofisticada sociedad antigua.
Una fortificación militar avanzada, un complejo de guardia bien definido, desenterrado hace muy poco en Timna, que incluye establos de burros, señala al sistema de defensa altamente organizado de la comunidad y la dependencia significativa del comercio de larga distancia.
La fortificación es de los reinados de los reyes David y Salomón en el siglo X aC.
“Aunque no hay una descripción explícita de las minas del Rey Salomón en el Antiguo Testamento, hay referencias a los conflictos militares entre Israel y los Edomitas en el Valle de Arava”, dice en un comunicado Erez Ben-Yosef del Instituto de Arqueología de la TAU y uno de los líderes del equipo de investigación y excavación de Timna.
“Según la Biblia, David viajó cientos de kilómetros desde Jerusalén y se involucró en un conflicto militar en el desierto, abatiendo a 18 mil Edomitas en el Valle de Salt” agrega Ben-Yosef.
Ahora, al haber encontrado evidencia de medidas defensivas, una fortificación sofisticada, comprendemos lo que debe haber estado en juego para él en esta remota región: el cobre.
“El cobre era un producto raro y muy difícil de producir y por tanto codiciado” continúa Ben-Yosef.
“El descubrimiento de la fortificación indica un período de grave inestabilidad y amenazas militares en ese momento en la región” explica el especialista.
En la fortificación de dos estancias, ubicada en uno de los mayores campos de fundición en el valle de Timna, los investigadores también encontraron evidencia de un complejo sistema de comercio de larga distancia que, de manera probable, incluía la meseta norte de Edomita, la llanura costera mediterránea y Judea.
El complejo ofrece acomodo para animales de tiro y otros animales y de acuerdo con los análisis precisos de polen, semillas y fauna, “fueron alimentados con heno y orujo de uva que era un sustento de alta calidad que debe haber llegado desde cientos de kilómetros de distancia”.
“La fortificación de la puerta de entrada era al parecer un hito prominente”, dice Ben-Yosef.
“Tenía una función cultual o simbólica, además de sus funciones defensivas y administrativas” agrega el especialista.
La puerta de entrada se construyó de piedra resistente para defenderse contra la invasión y se encontraron huesos de animales y pilas de estiércol tan intacto, se podría analizar la comida con la que los animales fueron alimentados con precisión.
“La comida sugiere un tratamiento especial y cuidado de acuerdo con el papel clave de los burros en la producción de cobre y en el comercio en una región logísticamente desafiante” explica Ben – Yosef.
El sitio fue descubierto en 1934 por el arqueólogo americano Nelson Glueck quien llamó al sitio de fundición de cobre “Colina de los Esclavos”, porque creía que llevaba todas las marcas de un campamento de esclavos de la Edad de Hierro completo, con hornos de fuego y una formidable barrera de piedra que parecía diseñada para evitar la fuga.
Pero en 2014, Ben-Yosef y sus colegas desacreditaron esta teoría, revelando que las ruínas, en perfecto estado de conservación gracias a las condiciones del desierto, apuntaban a una sociedad jerárquica y sofisticada.
“Se discute la exactitud histórica de los relatos del Antiguo Testamento, pero la arqueología ya no se puede usar para contradecirlos”, observa Ben-Yosef.
“Por el contrario, nuestros nuevos descubrimientos están en completa conformidad con la descripción de los conflictos militares contra una sociedad jerárquica y centralizada situada al sur del Mar Muerto” finaliza el especialista.
La investigación fue publicada recientemente en The Journal of Archaeological Science. Nomyc-18-1-17