Día Mundial del Sueño

Aunque la falta de calidad de sueño se puede presentar a cualquier edad con el paso de los años suele acrecentarse  

Buenos Aires-(Nomyc)-El Sueño, cuyo Día Mundial se conmemoró el viernes, es período importante en la vida diaria por lo que es una sub especialidad de la neurología que en los últimos años tomó importancia debido a las dificultades que muchas personas tienen para conciliar un buen dormir, situación que con los cambios de hábitos que generó la pandemia del covid-19, se vio agravada.

Se sabe que cuando se duerme mal, la vigilia posterior no será buena, la persona estará cansada, podrá tener somnolencia diurna, ganas de dormir, dificulta de concentración, dificultades cardíacas, y hasta en del sistema inmunológico, lo que a su vez repercutirá de manera negativa en cualquier tipo de actividad que deba realizar, lo que se es peor en aquellas tareas que involucren actividades peligrosas para sí o que incluyan a terceros.

En relación a los problemas que se pueden presentar durante el sueño, la mayoría suelen tener Apneas de Sueño, es decir pausas respiratorias de muy corta duración que a su vez y en un mecanismo de “defensa” del sistema respiratorio, genera microdespertares que disminuyen de manera importante la Calidad del Sueño, lo que a su vez repercutirá en la vigilia, como ya se dijo.

Un estudio en 2019 publicado en la prestigiosa revista The Lancet, reveló que más de 900 millones de personas entre 30 y 69 años experimentan apneas obstructivas del sueño de manera severa, y 425 millones de forma moderada a severa.

“El 40,44 por ciento dialoga con amigos/as, el 22,61 practica el rezo, el 22,09 recurren a un profesional psicólogo/a, el 21,57 toma medicación, sin especificar cuál, el 18,26 practica un deporte”, indica el documento, en el que se advierte que “el 8,89 por ciento consume alcohol”.

Por otro lado, los expertos evaluaron cuáles son las acciones positivas que realizan los argentinos frente a esta situación, pero más de la mitad de la muestra, en el 55,21 porciento, aseguró que no realiza actividades tales como actividad física, meditación, práctica religiosa o yoga.

Del 44,79 por ciento que sí lo hace, el 26,49 por ciento de los participantes informa practicar meditación, el 26,31 por ciento realiza actividades artísticas, el 27,84 por ciento efectúa acciones comunitarias, el 21,05 por ciento informa practicar una religión y el 9,15 por ciento practica yoga, mientras que algunos realizan más de una.

Para finalizar, tras ser consultados si se encuentran realizando algún tratamiento psicológico, más del 50 por ciento de quienes no lo realizan terapia dicen necesitarla, pero “el 34,75 por ciento tiene como impedimento no poder pagarlo”.

“Es decir, las personas con mayor riesgo de padecer un trastorno mental son quienes tienen más dificultades para acceder a tratamientos psicológicos, siendo quienes más los necesitan”, recalcaron los expertos del OPSA.

Sobre las Apneas: existen 3 tipos, ya que pueden ser Centrales, que se originan por algún problema en el sistema nervioso central que genera esta pausa respiratoria, pueden ser Obstructivas, que se generan por alguna obstrucción de la entrada de aire sea por nariz o por boca y por último, pueden ser Mixtas, que de manera masiva se inician como Obstructivas y termina como Central, aunque hay algunos casos inversos y en estos casos se suele tratar con la utilización de una especie de respirador, que mantiene constante el nivel de oxigeno por lo que la personas logra un buen dormir que se denomina CPAP.      

El Estudio del Sueño: en aquellas personas que tienen dificultades para lograr un buen dormir, se puede realizar una Polisomnografía, que es un estudio en el que se controla el dormir, desde lo neurológico como si fuera en un Electroencefalograma ya que así se controlan las etapas del sueño, que son 5, llamadas de la 1 a la 4 mientras que la 5 se denomina REM, que es la sigla de Movimiento Rápido de Ojos en inglés, ya que en la misma los párpados se mueven de manera muy rápida y junto al control del Sueño se verifican la entrada de aire por naríz y boca y el movimiento de los parpados, aunque según la situación se puede agregar algún otro control y en adurltos suele realizarce de noche.

El período de sueño normal en una noche se compone de varios ciclos de las 5 etapas iniciales, aunque luego de la primera, el siguiente no se inicia en la 1, sino que se continúa desde la 2 o la 3 y se llega a la REM, que es en la etapa en la que se Sueña y en la que debemos despertarnos, para poder recordar qué soñamos y durante 1 noche, de manera ideal se deben temer varios períodos completos, con todas la etapas, ya que si no se llega a la etapas profundas, el sueño no será efectivo.         

Nomyc-18-3-24

    

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