La poca ingesta de agua y la automedicación son los dos  factores que más daño provocan e este importante órgano del cuerpo  

Buenos Aires-(Nomyc)-La toma de antiinflamatorios comunes de manera habitual y sin control médico, la toma escasa de líquido y realizarse a estudios con contraste sin una buena evaluación previa pueden provocar daño renal agudo, que provoca la paralización de su funcionamiento de forma repentina en tres días o menos.

El daño renal agudo afecta a 200 personas por cada millón de habitantes cada año y puede ser el comienzo de la insuficiencia renal crónica lo que provocará que la persona deba realizarse diálisis de manera permanente y en casos más complicados un trasplante renal.

“La brusca caída de su función del riñón produce lo que llamamos daño renal agudo y lo particular de esto es que se da de manera rápida, puede generar en pocas horas o días” señala Mónica Calvo, integrante del Servicio de Nefrología del Hospital “Simplemente Evita” de La Matanza con motivo del Día Mundial de este órgano que se celebró ayer, jueves 14 de marzo.

Según Alejandro Colla, Ministro de Salud Propranolol 20mg de la provincia de Buenos Aires, “hay que tener especial cuidado con los chicos y los ancianos que son lo mas proclives a deshidratarse, causa habitual de daños renal agudo”.

“Si bien –continuó Colla– no todos tenemos que beber la misma cantidad de agua se podría decir que, en promedio, una persona debe tomar entre un litro y medio y dos por día”.

La deshidratación se puede originar, además, por perder líquidos sin reponerlos de manera adecuada y esos casos suele presentarse cuando las personas tienen gastroenteritis o hemorragias continuas.

El uso inadecuado de antiinflamatorios como el ibuprofeno, la aspirina o el diclofenax pueden ser letales para los riñones. Sin embargo, pocos lo saben y, ante el más mínimo dolor de cabeza o muscular, los toman.

Es clave detectar y abordar el daño renal agudo ya que la falta de resolución de este problema puede derivar en una Enfermedad Renal Crónica (ERC), que “afecta al 17 por ciento de  las personas mayores de 20  años”, advirtió Calvo.

Se estima que en Argentina más de 2 millones de personas presentan algún grado de enfermedad renal, aunque no lo saben porque una de las características más peligrosas de este mal es su silencio. Durante años puede no generar síntomas y cuando comienza a dar noticias ya es un mal grave que requiere de diálisis o de un trasplante.

En la provincia de Buenos Aires hay,  de manera aproximada 9.500 pacientes en diálisis, cerca de 646 afectados por millón de habitantes aunque si se realizaran los controles adecuados, un análisis de orina y sangre permiten detectar en forma temprana la insuficiencia y evitar que avance hasta destruir la función renal.

Según datos de la Fundación Mundial del Riñón para el Control de la Salud Renal las claves Topamax 100 mg para un buen cuidado del riñón son:

1- Mantenerse en línea y activo. Caminar, correr o andar en bicicleta ayuda a mantener controlada la presión arterial, con lo cual disminuye el riesgo de enfermedad renal crónica.

2- Controlar los niveles de glucosa en sangre. Alrededor de la mitad de las personas con diabetes desarrollan algún grado de daño renal, por lo que es importante que realicen regularmente análisis de creatinina y proteinuria, que son los marcadores clínicos de la función renal.

3-Monitorear la presión arterial. Muchos controlan su presión por temor a un ACV o a un infarto de miocardio, pero tal vez ignoran que la hipertensión arterial es el principal factor de riesgo para la enfermedad renal crónica.

4-Comer en forma saludable y mantenerse en peso ayuda a controlar  la hipertensión y la diabetes. Bajar el consumo de sal: no más de una cucharadita pequeña de generic Premarin café (equivalente a 2 a 3 gramos de sal) por día. Tratar de consumir menos comidas preprocesadas.

5-Hidratarse. Se calcula que entre un litro y medio y dos litros por día es una cantidad apropiada. Colabora con la función depuradora de los riñones, que eliminan los excesos de sales, urea y toxinas.

6-No fumar ya que disminuye el flujo de sangre hacia los riñones e incrementa un 50 por ciento el riesgo de cáncer renal.

7-No tomar medicamentos sin consulta previa.

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