Descubren posible origen de déficit neuronales como epilepsia o autismo

Investigadores de España y Estados Unidos descubrieron un posible origen de determinados déficit neurológicos como epilepsia, parálisis cerebral o autismo son los “errores” en la migración masiva de nuevas neuronas durante los primeros meses de vida a la corteza prefrontal que se relaciona con las funciones cognitivas y de ejecución
Buenos Aires-(Nomyc)-Los investigadores han identificado una población masiva de neuronas jóvenes, no reconocidas anteriormente, que migran en el cerebro humano durante los primeros meses de vida contribuyendo a la expansión del lóbulo frontal, una región estrechamente relacionada con funciones cognitivas y de ejecución.
Estas migraciones ocurren de manera principal en los primeros tres meses de vida, pero persisten hasta cerca de los siete meses, siendo ya muy escasas las que se encuentran a partir de los dos años y a partir de los seis años ya no se detectan.
Dada la naturaleza dinámica del lóbulo frontal en las etapas de lactante, lesiones en el cerebro humano durante el periodo neonatal y tercer trimestre podrían afectar al reclutamiento neuronal de la corteza prefrontal, por lo que se generan ciertos déficit neurocognitivos y sensorimotores.
Según indican, dicha neurogénesis “ocurre justamente cuando el cerebro empieza a interaccionar con el ambiente que rodea al niño, lo que se traduce en un rápido incremento de tamaño y complejidad de esta región”.
Las nuevas neuronas se organizan en dilatadas cadenas que migran largas distancias ya que primero viajan de forma tangencial y paralela a la superficie de los ventrículos laterales, -muchas veces asociadas a vasos sanguíneos que le sirven de guía.
A continuación se dispersan de forma radial según se alejan de los ventrículos, y, finalmente, invaden la corteza prefrontal en todas direcciones.
Datos de trabajos previos La existencia de esta extensa migración de nuevas neuronas en el cerebro humano durante las etapas lactantes aparece luego de una serie de trabajos previos coordinados por el neurobiólogo mexicano Arturo Alvarez Buylla, de la University of California, San Francisco, Estados Unidos.
En estudios realizados entre los grupos de Valencia y San Francisco ya se había demostrado la existencia de células madre en el cerebro humano, y se identificaron dos rutas de migración de células en el cerebro de lactantes, que partían de la región ventral de las eminencias ganglionares y se dirigían hacia los bulbos olfatorios y la corteza prefrontal ventral.
Las migraciones descritas en esa ocasión se organizan en grandes cadenas de miles de células, cuya concentración les permite atravesar el complejo entramado nervioso que comienza a desarrollarse en las zonas más ventrales, donde se originan las células asociadas al ventrículo, hasta llegar a las capas superiores, donde se dispersan y comienzan la diferenciación.
“Estas células, que se diferencian en neuronas inhibidoras, serán las responsables de modular la información compensando el efecto de las neuronas excitantes, equilibrando la actividad del cerebro humano y contribuyendo a la plasticidad de sus circuitos”, señalan los investigadores.
José Manuel García Verdugo, científico del Instituto Cavanilles de la Universitat de Valencia asegura que es “precisamente aquí donde un error podría dar lugar a desórdenes neurológicos”.
El artículo, publicado en “Science” se señala que para seguir estas rutas de migración, los autores observaron que “las células expresaban marcadores moleculares característicos de células migradoras inmaduras”.
Además, luego del análisis de su ultraestructura con microscopía electrónica, identificaron características que indicaban movimiento celular, como su morfología fusiforme o la presencia de contactos densos esporádicos.
Consiguieron ver el movimiento real de estas células migradoras “in vivo” empleando rebanadas de tejido postmortem obtenidas a las pocas horas del fallecimiento, en las cuales marcaron con fluorescencia las células migradoras y vieron cómo éstas se desplazaban en cadenas e incluso cómo algunas se separaban para migrar individualmente hasta llegar a su destino final. Nomyc-18-10-16