Crearon el primer mapa de Linfomas asociados a virus en América Latina

La iniciativa servirá para comprender mejor las diferencias regionales de los cánceres del sistema linfático y aconsejan conocer los síntomas para tratar la enfermedad tempranamente

Buenos Aires-(Nomyc)-Los linfomas son cánceres que comienzan en las células del sistema linfático, sistema es una red de órganos, ganglios, conductos y vasos que producen y transportan el líquido con células que ayudan a combatir las infecciones y otras enfermedades.

Los linfomas son pocos conocidos por la población y falta entender sus causas, pero para comprender más, científicos de la Red Iberoamericana para el desarrollo de una plataforma para el estudio de Linfomas (RIAL-Cyted) confeccionaron un mapa col los virus que pueden producir linfomas, en un trabajo de un grupo investigadores, que incluye a la científica de Neuquén Vanesa Scholl.

El mapa de los linfomas causados por virus fue publicado en la revista especializada Cancers, de Basilea, Suiza, por profesionales de Salvador, Ecuador, Brasil, Uruguay, España y Argentina y Scholl, quien es oncología molecular y trabaja como directora Área Medicina Genómica Integrada en la Clínica Conciencia en Neuquén, fue una de las autoras.

El equipo de profesionales organizó, clasificó y analizó todos los estudios y reportes que había en América Latina y que estaban relacionados con virus y linfomas. Se concentraron en tres virus: el Epstein–Barr, el herpes virus asociado con el sarcoma de Kaposi y el virus linfotrópico-T humano tipo 1 (HTLV-1).

“Contar con este tipo de información es de suma importancia, porque nos permite realizar estimaciones futuras, hacer comparaciones entre distintas poblaciones y regiones, y conocer aspectos sobre el comportamiento biológico de los virus y su relación con los diferentes tipos de linfomas en toda Latinoamérica”, señaló Scholl.

María Victoria Preciado, del Instituto Multidisciplinario de Investigaciones en Patologías Pediátricas del Conicet en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez de Buenos Aires, detalló que los linfomas se clasifican en más de cien entidades distintas ya que pueden tener relación con virus, y otros no. Ciertos virus, como el Epstein-Barr, está asociado al linfoma de Burkitt y el HTLV-1 está relacionado a la leucemia T del adulto”.

“El Kaposi, en cambio, da una patología que no es linfoma de manera  estricta, sino el Sarcoma de Kaposi, que aparece en pacientes HIV positivo, pero también está relacionado con ciertos subtipos de linfomas y no todos esos virus causan linfomas en todas las personas” agrega la especialista.

“Ni todos los linfomas son causados por virus”, aclaran las especialistas, pero cuando se hacen estudios en series de pacientes se observa que, de cada 100 casos estudiados a través de biopsias, más del 70 por ciento de los pacientes con un linfoma tenían presente un virus.

“Estos virus no son todos iguales, el Epstein-Barr se transmite por saliva y el 90 por ciento de la población mundial adulta fue infectada por este virus que queda silencioso en el cuerpo, pero hay otros, como el HTLV-1, que es un retrovirus y se transmite por la sangre, pero los bancos de sangre hoy lo controlan”, destacó Preciado.

Por último, para Paola Chabay, investigadora del Conicet en el Hospital Gutiérrez, “el HTLV-1 está relacionado con poblaciones indígenas de Brasil o el norte de la Argentina y sobre el Herpesvirus asociado con el sarcoma de Kaposi no hay muchas publicaciones, pero se sabe que hay una distribución en pacientes inmunodeficientes, pero no hay una regionalidad específica y con respecto al virus Epstein–Barr, hay un tipo de linfoma T, que en casi toda América Latina está relacionado con niños menores a diez años”.

La prevención es lo mejor:

En 70 por ciento de los pacientes con diagnóstico precoz tienen probabilidad de supervivencia a 5 años y la probabilidad en los pacientes con diagnóstico en estadio avanzado es del 58 por ciento

Según Scholl en la Argentina se observó en que la población pediátrica con el llamado Linfoma de Hodgkin existe una relación de cera del 50 por ciento de presencia de virus Epstein-Barr, mientras que en adultos con la misma patología solo se lo encuentra en el 31 por ciento de los casos. 

“El mapa sobre virus asociados a linfomas es interesante ya que abre nuevos interrogantes para investigar, porque en el país falta un registro nacional de casos de linfomas”, comentó el presidente de la Sociedad Argentina de Hematología y jefe de hematología del Hospital Británico de Buenos Aires, Germán Stemmelin. 

Los pacientes pueden requerir quimioterapia, radioterapia, terapia dirigida o inmunoterapia según el tipo y los estadios en que se encuentra la enfermedad y la terapia dirigida es un tratamiento para el que se utilizan medicamentos u otras sustancias, como los anticuerpos monoclonales, para controlar las células cancerosas, mientras que la inmunoterapia, incluye a fármacos inhibidores que se usan para ciertos linfomas.

Para el futuro la Red RIAL-Cyted seguirá contribuirá al conocimiento del linfoma en América Latina para comprender mejor el riesgo de casos que son inducidos por virus y se trabaja en capacitaciones e intercambio entre profesionales para el beneficio de los pacientes y toda la comunidad.

Prevención y síntomas: en la Argentina, solo uno de cada 5 pacientes con linfoma puede identificar los síntomas antes del diagnóstico, de acuerdo a una encuesta realizada por la Red Mundial de Grupos de Pacientes con Linfoma.

Los síntomas más comunes son:

-Crecimiento, generalmente indoloro, de uno o varios ganglios linfáticos.

-Cansancio.

-Aumento de la temperatura (en general durante la noche) hasta no más de 38 grados.

– Pérdida de peso y de apetito.

– Sudores nocturnos.

– Picazón persistente en todo el cuerpo.

– Tos, falta de aire y dolor de cabeza.

Es probable que la mayoría de las personas con los síntomas mencionados no tengan Linfoma, pero si lo tienen de manera persistente deben consultar al médico y los pacientes con diagnóstico precoz tienen 70 por ciento de probabilidad de supervivencia a 5 años, aunque esa probabilidad decae al 58 por ciento de los pacientes con diagnóstico en estadio avanzado. 

Para mayor información, se puede consultar a la Asociación Civil Linfomas Argentina www.linfomasargentina.org .

Nomyc-16-2-21

« Volver